Cuando se habla de emprendimiento cientos de suposiciones saltan a la cabeza, tal vez la más frecuente es que se trata de un tema más dirigido a jóvenes que se están terminando su carrera y decidieron apostar por hacer una propuesta que tenga su sello propio para incursionar en el mundo empresarial.
Pero, eso no es obligatoriamente cierto. De hecho, el último estudio GEM (Global Entrepreneurship Monitor), que mide la dinámica empresarial en 70 países del mundo, entre ellos Colombia, reveló, por primera vez en ocho años que el grupo que lidera la creación de nuevas empresas en el país, no es el de los más jóvenes, sino el que está entre los 35 a 44 años y aún más revelador es que empieza a crecer el grupo integrado por emprendedores de 55 a 64 años.
A la par con esta noticia, el país también conoció hace pocos día que un grupo de trece alumnos de bachillerato del Gimnasio Los Caobos de Bogotá, recibió el reconocimiento The Masters London 2014 que premia iniciativas de emprendimiento de jóvenes latinoamericanos. El proyecto con el que los jóvenes colombianos ganaron la medalla de oro en la capital inglesa, consistió en la creación de una empresa que mezcla un hongo traído de Malasia con el café colombiano para producir un ‘supercafé’ con propiedades regenerativas.
Esas dos realidades dejan al descubierto que en temas de emprendimiento hay que dejar de lado las suposiciones, los mitos y las creencias limitantes. A continuación, Omar Andrés Sierra Morales, docente de la Universidad de La Salle enumera los mitos más comunes en este tema.
1. La principal motivación para crear una nueva empresa es por necesidad. Falso. Esa era la realidad hace unos años, pero si algo que han demostrado las encuestas es que el número de empresas que surgen fruto de la mera necesidad, ha venido reduciéndose desde el 2010 en el país, por ejemplo, el año pasado el 81,7% de los nuevos empresarios colombianos estuvo motivado por la oportunidad que representaba el negocio y no por estar como decimos popularmente ‘en la olla’. (Cifra del estudio GEM).
2. El tema de emprendedores está dominado por los hombres. Tristemente verdadero. De acuerdo con las estadísticas, al menos en lo que está registrado, es evidente la disparidad de género, ya que entre las empresas nacientes, 17.5% son creadas por hombres y 10% por mujeres.
3. El emprendimiento está reservado solo para jóvenes. Falso. El emprendimiento no tiene edad, en mi experiencia profesional he tenido la oportunidad de compartir con estudiantes de diferentes edades, desde los 16 años hasta los 50. Para ilustrar este tema, debo contarle que en la Universidad de La Salle tenemos una muestra empresarial en la que los estudiantes desde primer semestre tienen la posibilidad de trabajar en equipo y desarrollar proyectos emprendedores bastante útiles para la sociedad. De ese ejercicio han resultado productos como: juegos para invidentes, chaquetas especialmente diseñadas para personas con diálisis, teclados para personas con una sola mano, canguros paseadores de mascotas, aparatos para recoger fruta sin dañarla, en fin.
4. Las personas mayores tienen demasiados prejuicios para comenzar un proyecto de emprendiento. Falso. Es muy interesante ver como la experiencia de la persona de más edad, sumada al dinamismo y conocimiento de los más jóvenes crea una sinergía muy poderosa. Un buen ejemplo es el manejo de las redes sociales que ha permitido reunir a jóvenes aprendices de 20 años con Presidentes de compañía de 50 años, y entre la habilidad del uno y el criterio corporativo del otro, resultan grandes planes de mercadeo digital. Definitivamente el tema de la edad no es una restricción para ser un emprendedor.
5. Se necesita tener dinero para ser emprendedor. Falso. Más que dinero se necesitan personas emprendedoras, sin lugar a dudas el dinero es un aspecto importante, sin embargo, hoy existen formas como la financiación colectiva o la cooperación para la financiación que en diversos sitios suele referenciarse como crowdfonding para lograr reunir recursos económicos.
6. El componente vital del empredimiento es un buen proyecto, una idea innovadora. Verdadero. Por más dinero que se tenga no es posible ser un auténtico emprendedor sino se tiene un buen proyecto. El emprendimiento en términos generales se puede relacionar con esa capacidad que tenemos las personas de hacer una mezcla perfecta entre esfuerzo, actitud, aptitud, creatividad e innovación. Vale la pena decir que los colombianos somos bastante emprendedores, este emprendimiento se desprende de factores como las necesidades propias y las del mercado.
7. El fracaso está a la vuelta de la esquina. Falso. Hablar de fracaso es como asegurar que la idea nunca fue viable. Para evitar esto, en primer lugar se hace necesario diferenciar la creatividad entendida como la acción que se traduce en una capacidad de generar nuevas ideas, y por otra parte la innovación en la que además de crear algo nuevo, novedoso y original, se debe estructurar y traducirla en un producto o servicio que tenga impacto real en el mercado. En dicho sentido, se puede decir que la creatividad es el principal insumo para llegar a la innovación.
8. El gusto personal por el tema es suficiente. Falso. Tener gusto por lo que se hace, es decir, divertirse es importante, pero no lo único. Siempre hay que acompañar las iniciativas con una investigación de mercados adecuada en la que el primer paso es aprender a observar. Las personas emprendedoras saben combinar sus actitudes con sus aptitudes. No basta con generar ideas creativas, se debe llegar a las ideas innovadoras.
Breve perfil
Omar Andrés Sierra Morales. Docente e investigador de la Universidad de La Salle
Administrador de Empresas y Magíster en Administración. Profesor de Tiempo Completo de la Facultad de Ciencias Administrativas y Contables Universidad de La Salle. Desde el año 2002 ha liderado las diferentes versiones de la Muestra de Proyectos Empresariales en la Facultad, actividad que surge como el resultado de un proceso formativo que articula la teoría con la práctica a través de la presentación organizada de las ideas de emprendimiento de los estudiantes de la Facultad, en dicha actividad ha asesorado a estudiantes de diferentes semestres en la creación y promoción de sus proyectos. Actualmente es el líder del Grupo de Investigación GAO (Gestión, Administración y Organizaciones) perteneciente a la Universidad de La Salle.